Imagina entrar en un taxi modelo nuevo, bonito, limpio y perfumado, que cuando comienza andar el único sonido que escuchas es “ñiqui..ñiqui..ñiqui…..crac..crac..crac” el típico ruido de metal con metal oxidado. Creo que todos ya entramos en un carro nuevo con ruidos de viejo y en un carro viejo sin ningún sonido des confortable; eso se llama “MANTENIMIENTO PREVENTIVO”. Igualmente es nuestro cuerpo, independientemente de la edad y sí de nuestro estilo de vida.
El cuerpo humano es una máquina increíble, nacemos con aproximadamente 270 huesos inmaduros los cuales disminuyen a 206 cuando adquirimos la madures ósea; junto a estructuras como músculos, tendones, ligamentos, liquido sinovial y cartílago forman aproximadamente 360 articulaciones ¿dato interesante verdad?. Pues algunas veces sólo identificamos que existen algunas articulaciones en nuestro cuerpo cuando duelen.
Existen varias clasificaciones de las articulaciones, pero en este artículo para efectos prácticos las clasificaremos en: Sinoviales (contienen liquido dentro de una capsula articular como: hombro, rodilla, cadera, codo), Fibrosas (huesos unidos por tejido fibroso como: suturas del cráneo y articulación tibio peronea distal), Cartilaginosas (huesos unidos por cartílago como: articulación de las costillas o condrocostales); de esta forma podemos imaginarnos que tenemos articulaciones que son móviles y articulaciones que son fijas, y esa es la gran importancia de esta clasificación, porque según es el tipo de articulación así es el abordaje terapéutico que los ortopedas indicamos para nuestros pacientes.
Por ejemplo, si abordamos lesiones en articulaciones fibrosas o cartilaginosas ellas por definición son fijas o con leve movilidad; lo que nos indica que el tratamiento debe ser inmovilizar y estabilizar para su cicatrización adecuada. A diferencia de una lesión en una articulación tipo sinovial que, por la complexidad de su estructura, el tratamiento se fundamenta en reconstrucción, estabilidad, movilidad y flexibilidad.
Recordemos que la mayoría de las articulaciones contienen estructuras de tejido fibroso y cartilaginosos que, nos ayudan a absorber los impactos ocasionados por nuestro día a día, y cuando nuestros músculos están débiles y atrofiados o estamos con sobrepeso, nuestras articulaciones sufren más agresión de lo normal creando desgaste y procesos inflamatorios que nos ocasionan dolor.
La falta de cuidados y atención a nuestras articulaciones nos pueden llevar a enfermedades conocidas como artrosis, artritis, enfermedades reumáticas, entre otras. Por eso la prevención siempre será nuestro mejor tratamiento y lo mejor de todo, es que está a nuestro alcance, exigiendo apenas un poco de atención diaria y mejoría de nuestro estilo de vida.
Estos son algunos consejos para mejorar nuestra salud articular:
1. MOVIMIENTO = SALUD
Mantenerse en movimiento ayuda a que sus articulaciones funcionen mejor y evita la rigidez y consecuentemente futuras lesiones.
- En las articulaciones móviles como hombro, rodilla, codo, cadera, muñeca y dedos realice diariamente movimientos de estiramiento máximo por 7 segundos (flexión y extensión máximas) sin llegar a sentir dolor por forzar la amplitud de la misma.
- Manténgase en movimiento, mismo cuando esté relajado frente a la televisión, viendo una película o series, cambie de posición o haga pausas para moverse.
- Igualmente, en viajes largos de avión, bus o carro manténgase en movimiento; en especial, realice estiramientos frecuentemente.
- Evite movimientos bruscos o, sobrepasar sus límites de fuerza.
- Realice actividad física que sea de su agrado para que mantenga la constancia, ya que así fortalece sus músculos ayudando a mantener la estabilidad de la articulación
2. CONTROLE SU PESO
El cuerpo avisa cuando estamos con sobrepeso, principalmente nuestra columna, rodillas, pies y cadera pues la sobrecarga se concentra en ellas y nos ocasiona dolor. Por eso es importante aprender a gerenciar nuestro peso corporal con un estilo de vida saludable mas activo y con una buena conciencia alimenticia diaria.
Recuerda que lo mas importante no es como queremos estar, y si: cómo NO debemos permanecer.
3. OBSERVE SU POSTURA
Mantenga siempre una postura recta al caminar, eso ayuda a fortalecer los músculos de la espalda y mantener la columna vertebral en su posición funcional, evitando la formación de alteraciones Oseas, contracturas y hernias. Así también evita problemas en la articulación de la cadera y rodillas, que frecuentemente compensan al caminar.
Si trabaja sentado, mantenga una altura adecuada entre la silla y la mesa del escritorio manteniendo una postura a 90° al apoyar el codo; eso es ergonomía.
Utilice sus piernas al levantar objetos del suelo, pues flexionando las rodillas al agacharnos disminuimos la sobrecarga en la columna.
4. CUIDADO CON LOS MOVIMIENTOS REPETITIVOS
El movimiento repetitivo principalmente en trabajos manuales como fábricas o digitar en el computador, nos hace olvidar de nuestra postura y nos produce desgaste articular y procesos inflamatorios, desde los dedos hasta el hombro. Realice ejercicios de refuerzo muscular y fisioterapia preventiva, como estiramiento y, flexión de los dedos muñeca y hombros, para evitar tendinitis y bursitis, que son enfermedades frecuentes en este tipo de trabajos.
5. UTILICE ZAPATOS ADECUADOS
Calzados anatómicos y confortables, es el secreto para evitar dolor y una postura inadecuada. Invierta en un calzado adecuado a su estilo de vida, eso evitara muchos problemas futuros que serán más caros de resolver (fascitis, tendinitis, juanete, esguince, entre otros).
6. ALIMENTACION ADECUADA
- No se trata de hacer dieta (como ya comenté en otros artículos, pues sólo decir esa palabra ya nos da dolor de cabeza y mucha más hambre); se trata realmente de mantener una alimentación adecuada a nuestro estilo de vida.
- La fórmula es simple: “menos carbohidratos = menos aumento de peso = menos dolor articular”, puedes comer de todo, en proporciones adecuadas en varios intervalos de tiempo en el día, eso evita que sientas hambre y mantiene tu cuerpo con la energía adecuada para desempeñar sus funciones de forma eficiente. Realmente lo difícil es iniciar un viernes, ya que nuestro cerebro procrastinador siempre nos empuja para iniciar un lunes; pero recuerda, con motivación y diciplina logramos nuestros objetivos.
7. SUPLEMENTOS VITAMÍNICOS Y MINERALES
En la actualidad nuestro día a día parece que tiene menos de 24 horas, pues siempre estamos corriendo y sin tiempo, eso nos deteriora de forma física y mental, pues parece que dejamos todo a medio camino, alimentándonos rápido y de forma inadecuada. Al final, el cuerpo nos pasa la factura de nuestras malas decisiones, especialmente nuestras articulaciones, pues ellas sufren el peso de nuestra inconsciencia, por eso es importante complementar nuestros déficits alimenticios con suplementos adecuados (multivitaminas), complementar con Colágeno para recuperar las perdidas por la edad y mejorar la función articular.
8. ESCUCHE SU CUERPO
Nuestro cuerpo nos señaliza cuando algo no está bien, él se comunica a través del dolor, inflamación, adormecimiento, sonidos crujientes y debilidad.
Manténgase alerta siempre a estas señales y busque consejos médicos preventivos, no espere hasta ellas convertirse en incapacidades funcionales que limiten nuestra vida.
9. CUIDE SUS MANOS
Nuestras manos son diariamente expuestas a factores externos, por lo cual debemos cuidar de ellas diariamente y no me estoy refiriendo a la piel, y sí al inmenso complejo articular y tendinoso existente en ella. Evitemos el relajante sonido y sensación de bienestar que nos da el torcernos los dedos o vulgarmente llamado ¡tronarse los dedos! Pues ocasiona inestabilidad articular.
Estire y flexione sus dedos antes de iniciar cualquier trabajo que requiera de fuerza o de repetición para evitar lesiones futuras.
Después de realizar esfuerzo con las manos o la muñeca, es importante sumergirla en agua helada por 10 segundos en tres intervalos de tiempo, para disminuir el proceso inflamatorio y posteriormente el dolor.
10. NO SE OLVIDE DE SUS PIES
Los pies siempre se tornan el último lugar que cuidamos de nuestro cuerpo, y solo nos acordamos de ellos para cortarnos las uñas o cuando nos duelen por alguna razón y casi siempre es por caminar mucho, por calzado inadecuado, por inflamación o por deformidad articular.
- Ahora imagina el peso y las agresiones que el pie y tobillo reciben diariamente al caminar, saltar, correr, postura incorrecta, etc.… por eso no olvidemos realizar estiramiento con rodillo en la planta de los pies, ejercicios de refuerzo muscular como ponerse de puntillas y masajear nuestros pies para liberar la rigidez articular que ocasiona mucho dolor, igualmente los espolones calcáneos y el halux valgus, llamado comúnmente como juanete, causado generalmente por calzado inadecuado.
En la actualidad, Lesiones y desgastes articulares son los problemas ortopedicos más frecuentes en personas con más de 50 años y pueden asociarse no sólo a impacto y sí, a predisposición genética y malos hábitos de vida. Por esas razones el mejor consejo que puedo ofrecerte para cuidar tus articulaciones es mantenerte siempre en movimiento y realizar ejercicios de mantenimiento muscular, ya que los músculos, junto a tendones y cartílagos, son el techo y las paredes de nuestras articulaciones.