En mi columna anterior, compartí algunos TIPS sobre cómo decir ¡Adiós, Procrastinación! Si aún no la has leído, te invito a hacerlo aquí!
En esta oportunidad, quiero seguir compartiendo algunos consejos para construir hábitos que te permitan ser más efectivo en el uso de tu tiempo.
Si bien es cierto, sabemos que ser perseverantes es una característica que muchas personas poseen, y son admirados por ella. Sin embargo, a muchas otras personas, esta misma característica parece ser hasta inalcanzable. En lo personal, me gusta pensar que cada persona puede seguir avanzando y siendo transformada en una mejor versión de sí misma.
Pero cuando se trata de cultivar nuevos hábitos, ¿Dónde comenzamos?
Lo más importante es enfocarnos en una cosa a la vez. Si el caso es que nos cuesta adaptarnos a cambios drásticos, probablemente hacer cambios extremos no sea la mejor idea para comenzar, porque estaremos más propensos a pensar que no podemos hacerlo, o a buscar la mejor excusa para dejarlo a un lado. Hoy quiero proponerte una idea nueva para avanzar y transformar un hábito a la vez.
Existen diferentes formas de crear nuevos hábitos, ya sean de lectura, de salud, alimenticios, para aprender una nueva habilidad, lenguaje, etc. ¡Lo más importante es ser enseñables! Aún para nuevos hábitos, no nos olvidemos que aprender es un proceso. Para desarrollar un hábito, primero debes aprenderlo, y vivirlo.
Muchas veces pensamos que, para intentar algo nuevo, necesitamos saber cómo debemos hacerlo. Pero quizás, la primera pregunta debería de ser ¿Por qué quieres hacerlo? ¿Cuál es el motivo? Ese motivo es la razón por la cual tú estarás comprometido contigo mismo para hacer de ese objetivo o esa actividad en un hábito.
- El primer paso es tener UN OBJETIVO claro y alcanzable. ¿Qué hábitos quieres establecer en tú vida? Elige solamente uno para iniciar. Cuando hacemos esto, podemos enfocar nuestros esfuerzos y tener mejores resultados. Debe ser algo alcanzable, algo que puedas hacer en el tiempo que tienes disponible en tu día. Dependiendo de la naturaleza del hábito que deseas crear, así serán los siguientes pasos. Si es un hábito de lectura, puedes proponerte metas alcanzables: leer 10 páginas de un libro al día.
- El segundo paso es REPETIRLO. Los hábitos se crean cuando repetimos esa acción. Es importante que las actividades que seleccionamos puedan repetirse a diario, en un horario específico. Por ejemplo, para hacer ejercicios, resulta más fácil pensar que voy a hacer ejercicio a las 6pm, que pensar “por la tarde voy a hacer ejercicio”. Si es sobre lectura, es más fácil destinar un tiempo específico, aun cuando ese tiempo sea entre otras actividades.
- El tercer paso, es la RECOMPENSA. No significa necesariamente incurrir en gastos para “obsequiarnos un premio”. Se trata de reconocer tu propio esfuerzo. ¡Nadie más sabe el esfuerzo que estás haciendo! Cuando reconoces y valoras tu esfuerzo, encuentras motivación para seguir haciendo lo que te has propuesto hacer.
Recuerda que todo lo que haces a diario, se vuelve parte de tu rutina consciente o inconscientemente. Cuando continúas practicando lo que te has propuesto, pronto dejarás de pensar que “debes hacerlo”, y comenzarás a hacerlo porque quieres hacerlo. La constancia se desarrolla en el tiempo.
Te invito a seguir leyendo mi columna de opinión donde continuaré compartiendo de diferentes temas que me apasionan.